martes, 24 de septiembre de 2013

El tiempo que no fue...!

Cada persona reflejada en una imagen lleva en su conjunto las huellas de su vida, en cada imagen que nos permite recordarla no habla de su vivencia en ese momento. La alegría con la que se para frente a la cámara de turno suele a veces enmascarar un tristeza guardada muy profundamente por aquel tiempo que no fue …
 Nos sentamos entonces a la vera de una caja llena de álbumes de fotografías que enmarcan recuerdos de una vida vivida intensamente y que giran alrededor de una historia de vida, la historia de la abuela Concepción, Concha o Chicha se cuentan entre los apodos mas conocidos por mi hasta el momento...
Son sus fotografías antiguas y modernas las que nos van paso a paso reconstruyendo un camino que emerge desde imágenes en blanco y negro, descoloridas imágenes en sepia, pasando por la era del móvil con cámara en sus distintas etapas, hasta llegar a nuestros días en las que mi esposa empuñando la más moderna tecnología le retrataba junto a sus nietos...
 Cada imagen guarda una historia que mi esposa cuenta recordando momentos y pinceladas de otras historias, que emergen al reconocer junto a su madre a otras personas que tambien fueron marcando la vida de aquella mujer trabajadora con la que había compartido vivencias y a la agradecía el amor y el cariño con el que había cuidado a sus hijos. Gracias a dios a todos ellos.
 Lágrimas y sonrisas se suceden una y otra vez a veces con dolor otras con alegría y emoción pues ahora que ya no esta su recuerdo es el modo de decirle gracias, no te olvidaremos nunca.
Es fin de semana y la televisión resuena con los programas que la abuela solía ver, no sin antes luchar un poco con sus nietos, una lucha con resultado compartido. A veces los nietos; otras la abuela.
Este tiempo cotidiano rivalizó con aquel tiempo que no fue, un tiempo que quizas ahora que no esta entre nosotros este recuperando junto a aquellos seres queridos que se fueron antes que ella y que ahora le arropan en el cielo donde esta su estrella, como dicen nuestros pequeños al referirse al lugar donde ahora esta su abuela. Ese tiempo guarda una batalla última que se librará en las conciencia de personas que no merecen la pena de ser recordadas en esta historia, no más de lo necesario.
Abuela, abuá o el último alé, seran ahora un recuerdo para ella de quienes desde aquí, siempre esperan su regreso. Voces dichas con medias lenguas o lenguas enteras que alguna vez llenaron el silencio de la casa, cambiándolo po rsonrisas y canciones.
A veces cunado la mente nos traiciona y nos csaca de esta vorágine cotidiana se centra en el sentimiento del recuerdo de momentos que queremos volver a revivir, aún cuando nos arranquen una lágrima también nos traen a la memoria sonrisas y emociones.
Homenajes a personas vemos en nombres de calles y bustos de gloriosos héroes que coronan plazas y monumentos, pero en nuestro particular homenaje a nuestra querida abuela recordamos algunas de sus frases mas ocurrentes, canciones con melodías de su tierra gallega, estrechamos contra nuestro pecho aquella manta inconclusa que con todo su amor comezara para que adornace la cama de la habitación matrimonial y volvemos a recorrer su historia que comenzó a hilar en aquellas antiguas imágenes en blanco y negro y que llegan hasta hoy llenas de vivos colores y rodeada de nuestros niños que llenaron su pecho de alegría y amor... Por siempre!